Valsaín

En pleno corazón del Parque Nacional de Guadarrama y también conocido como Balsaín, forma junto a La Pradera, Riofrío y La Granja de San Ildefonso el Real Sitio de San Ildefonso. El origen de todo se encuentra en este pequeño pueblo, cuyo paraje solía frecuentar la realeza cuando estaba en el Alcázar de Segovia. Hasta aquí venían a cazar, especialmente Enrique IV, que construyó un lugar para alojarse cuando venía a estos menesteres al que llamó “La casa del Bosque”. Más tarde fue Felipe II quién visitó este lugar a menudo por lo que decidió ampliar la construcción transformándola en todo un palacio.

Maqueta del Palacio de Valsaín

Ruinas del Palacio en la actualidad.

Desgraciadamente, tras varios proyectos de recuperación, no quedan más que ruinas pidiendo a gritos un mejor trato para este lugar que fue Sede Real y desde el que llegó a dirigirse “el Imperio en el que no se ponía el sol”. Sólo nos queda la estupenda maqueta del CENEAM que nos da una idea bastante aproximada de lo que fue la “casita” del Bosque antes de ser usada como cantera para el nuevo palacio de verano de Felipe V, que en vez de repararla tras su último incendio decidió darle este uso.

La Pradera

Valsaín 006

Valsaín

Debemos diferenciar un poco, ya que cuando llegamos por primera vez a este lugar nos podemos encontrar algo confusos. En la misma carretera si venimos de la Granja o de Segovia encontramos primero la Pradera, un conjunto de casas muy llamativas que se distinguen por su construcción de madera muy oscura y tonos rojos. Este pequeño poblado surgió en torno al aserradero, en el que se explotaban hasta hace pocos años la muy apreciada madera de los montes de Valsaín. La razón de la oscura madera de estas casas es que se usaba la grasa vieja de la máquina de vapor del aserradero como aislante, así como la sangre de animales, de ahí la tonalidad roja. Más adelante encontramos junto a la iglesia otro conjunto de casas muy particulares hechas con granito y pizarra, que nos resultarán familiares si hemos estado en lugares pertenecientes al Patrimonio Nacional, que ordenó su construcción para los trabajadores de esta entidad; son conocidas como el Barrio nuevo.
Continuando hacia el río, al otro lado del puente, encontramos Valsaín, el pueblo, pueblo precedido por la maravillosa pradera de Navalhorno a su izquierda, un remanso de paz en cualquier época del año con un paisaje bucólico.

Pradera desde el puente de Valsaín

La pradera bajo la nieve

Sin embargo el valor actual de Valsaín está en su ubicación al pie de la montaña y en el entorno, inmejorable para los amantes de la naturaleza. Son muchos los senderos que parten o atraviesan el pueblo e innumerables los visitantes que los aprovechan durante todo el año para llegar al Puente de los Canales, Los Asientos o La Boca del Asno, lugares, estos dos últimos, que se han aprovechado y acondicionado desde hace años como merenderos o zonas recreativas donde pasar el día junto al río. O recorrer las Pesquerías reales de unos 9 km en su totalidad que se pueden hacer por tramos de dificultad escasa. Estas son las rutas más populares pero hay muchas más que forman parte de los recorridos del Parque Nacional de Guadarrama, en el que está inmersa esta población, como: las subidas a la Fuenfría y la Calzada romana que forma parte del Camino de Santiago, la subida al puerto de Cotos, a la Cueva del Monje o la Chorranca, por citar algunos. El mejor lugar para recabar la información necesaria sobre estas rutas y las visitas guiadas por el bosque es el Centro de interpretación “La boca del Asno”.

Monumento en Valsaín

Parque Nacional de Guadarrama

Hablar de Valsaín es hablar de madera pues el pueblo está íntimamente ligado a sus montes que comprenden toda la vertiente norte de la sierra de Guadarrama en el término de la Granja. Muchos son los oficios madereros que aún se mantienen y aquí se halla el que fue Real Aserrío de los Montes de Valsaín. Actualmente son regulados y explotados de forma sostenible por el Centro de Montes dependiente del Organismo Autónomo de Parques Nacionales del ministerio de Medio Ambiente. De éste último depende también el CENEAM, cuyas instalaciones de encuentran también en Valsaín y que, entre sus muchas actividades, contempla los paseos guiados por el monte.